viernes, 30 de abril de 2010

"Iron Man 2": El hombre de hierro se empieza a oxidar

La primera adaptación cinematográfica de Iron Man fue una verdadera sorpresa. Le fue muy bien en la taquilla, los espectadores -muchos de los cuales conocían muy poco del personaje- salieron contentos y una muy considerable cantidad de críticos le dieron su visto bueno. Al ver que habían cabos sueltos, todo el mundo pidió continuación.

Y dos años después llega Iron Man 2, la esperada secuela en la que Jon Favreau narra las consecuencias de las acciones heroicas del multimillonario Tony Stark, sobre todo después de revelar la identidad de Iron Man. Paz mundial, portadas de revistas, entrevistas y apariciones son la cara buena de la moneda; pero por otro lado, Stark tendrá que enfrentar al gobierno que quiere apoderarse del traje, a su deplorable estado físico y a su excéntrica personalidad. Por si eso fuera poco, la aparición de un nuevo villano y el auspicio que éste tiene por parte de la competencia complicarán su situación y pondrán en duda su papel de héroe ante los ojos del público.

La fórmula que hizo inolvidable al primer Iron Man se vuelve a aplicar en esta película: se conserva el reparto original (salvo un cambio no conveniente), se incluyen efectos visuales sorprendentes y además se mantiene la socarronería de su protagonista. Pero no todo funciona a la perfección, y el último punto es un arma de doble filo: sin bien Robert Downey Jr. es un actor con gran carisma y presencia, su personaje parece no evolucionar ni siquiera en los momentos dramáticos que enfrenta y, lo que es peor, a veces se tiene la sensación de no ver a Robert interpretando a Tony, sino a Robert jugando a ser él mismo.

La inclusión de Mickey Rourke, Sam Rockwell y Scarlett Johansson en los roles de Ivan "Whiplash" Vanko, Justin Hammer y Natasha "Viuda Negra" Romanoff, respectivamente, son atractivos para la audiencia. Sin embargo, Rourke no colma las expectativas como el villano de turno, limitado en sus apariciones y no siempre para poner en aprietos al héroe, salvo en sus dos enfrentamientos. Lo contrario pasa con Rockwell, a quien se le debe muchas de las escenas cómicas, y Johansson, quien se roba el show y opaca a todos los personajes que osan aparecer en sus escenas, incluido el mismísimo Robert Downey Jr. y Gwyneth Paltrow, el otro personaje femenino importante en la película.

Pese a las deficiencias mencionadas y a una estructura narrativa que cae en lo redundante, Iron Man 2 le da a Jon Favreau -en su condición de director- una nota aprobatoria en su intento de iniciar una nueva saga cinematográfica. Aunque claro, muchos esperábamos más de esta secuela. Ojalá el superhéroe regrese en un tercer episodio para poner las cosas en orden y con el celebérrimo traje en mejor estado.

Mi calificación: 6.2 de 10

miércoles, 28 de abril de 2010

¿Es esta la manera de luchar contra la piratería?

"¡Aquel que nunca haya comprado algún artículo pirata -especialmente películas-, que ponga en marcha la aplanadora!" - dijo un pirata.
"¿Qué dices? No te escuchamos. ¡Habla más fuerte, pezweón!" - dijeron en coro los empleados de un organismo público peruano y de algunas cadenas de cine, antes de aplastar alegremente -con la maquinaria pesada y con los pies- miles de películas piratas que yacían en las afueras de la institución.

Incluso se tomaron fotos (publicadas en Facebook) para conmemorar el "acto simbólico", que seguramente en algunas horas o mañana algunos medios convertirán en "un duro golpe contra la piratería".




¿Reacción? Una mezcla de indignación y burla. Indignación porque se trata de la actitud de un bárbaro que destruye todo lo que encuentra y que omite el detalle de cuidar el ornato de la ciudad y el medio ambiente (¿habrán reciclado los restos después de la faena?), y burla porque esa acción ha sido repetida infinidad de veces sin éxito alguno.

¿Se podrá vencer a los piratas haciendo trizas sus copias? ¿Cuál será el siguiente paso de esa "lucha"? ¿Irán de casa en casa los dueños de los cines y los funcionarios estatales a decomisar laptops, computadoras o cualquier dispositivo que pueda albergar material ilegal?

Si mucha gente prefiere ver una película pirata en su casa y no en el cine, hay varios motivos de por medio que van desde el precio de las entradas hasta la variedad de títulos. Y eso que no estamos tomando en cuenta el precio de alimentos en las confiterías, el cual supera con creces lo que se paga por un boleto.

¿Algo más? Sólo pedirle a los cines y las tiendas de video que piensen en algo: replantear sus políticas, trabajar en conjunto con las distribuidoras y lanzar promociones a las que el público -al menos la clientela frecuente- pueda acceder con facilidad. Y no olvidadrse de que el factor clave son los precios y de que amor al cine no significa estar en una sala oscura masticando palomitas, sino disfrutar y apreciar la película que estemos viendo. ¡Basta de hacer el ridículo!

lunes, 26 de abril de 2010

La fantasía recargada de "El Imaginario Mundo del Doctor Parnassus"

Terry Gilliam ha hecho del exceso su marca de estilo. Desde su lejano y auspicioso debut en Monthy Python y el Santo Grial hasta el filme que hoy comentaré, el exceso ha estado presente como el elemento capaz de poner a algunas de sus obras en el sitial de películas de culto, o como el factor determinante para ubicar a otras en el bote de desperdicios cinematográficos.


El Imaginario Mundo del Doctor Parnassus es un caso especial, no porque la película esté dedicada a la memoria del fallecido Heath Ledger (ver una vez más al actor hace dudar de su muerte), sino porque se encuentra en la delgada línea que separa al genial Terry Gilliam del mediocre Terry Gilliam.
La historia transcurre en la Inglaterra contemporánea donde un grupo de actores ambulantes trata de sobrevivir llevando consigo una fuerte carga: un misterioso espejo capaz de mostrar la imaginación del que lo atraviesa. El jefe de ese destartalado teatro callejero es el Doctor Parnassus, un ex monje que obtuvo la inmortalidad gracias al diablo, quien regresa a cobrar el precio del favor: Valentina, la hija de Parnassus. Ante la inminente pérdida y la aparición del misterioso Tony, el diablo decidirá hacer una apuesta con el "Doctor": si éste gana cinco almas, su hija no será llevada al infierno.

Si bien el argumento es llamativo, su desarrollo se entorpece por las idas y venidas de un guión que brinda más detalles a la infinidad de elementos fantásticos que a sus personajes. Así veremos que la historia de Parnassus y su lucha por no perder a su hija se ven opacadas por el misterio de Tony, el personaje interpretado por cuatro actores, y que a su vez sucumbe ante los escenarios surrealistas que nacen detrás del espejo.

El filme en sí es una sucesión de imágenes que plasman la locura e inacabable creatividad de Gilliam y que, si hacemos una retrospectiva de la obra del realizador, encontraremos que El Imaginario Mundo del Doctor Parnassus podría ser la secuela de la delirante Las Aventuras del Barón Munchausen, película que en términos estéticos es su hermana.

Lo mejor de esta nueva aventura es la presencia de Heath Ledger, actor que seguramente nos estaría regalando buenas interpretaciones si siguiera vivo y que en el metraje es "homenajeado" por Johnny Depp y Colin Farrell (no menciono a Jude Law porque simplemente estaba sobrando). Christopher Plummer en el papel del Doctor Parnassus ofrece una actuación correcta, pero no lo suficientemente fuerte para sobresalir junto al resto del reparto.


De esta manera, El Imaginario Mundo del Doctor Parnassus se erige como un lienzo en el que se pinta un laberinto visualmente exquisito con un recorrido absurdo y caleidoscópico, pero que no tiene armonía con su final demasiado "lógico" y a la vez complaciente. ¿En qué rincón del espejo mágico se perdió el Terry Gilliam de Monthy Python, Brazil y 12 monos?

Mi calificación: 6.1 de 10

sábado, 24 de abril de 2010

Conclusiones después de ver el tráiler de "La Saga Crepúsculo: Eclipse"

Antes de continuar, mira el tráiler más "emocionante" del triángulo amoroso más predecible de la historia del cine (y la literatura). Si ya lo viste, puedes saltarte ese paso y observar las siguientes reflexiones gráficas.



LICÁNTROPO ES SINÓNIMO DE LOBO, NO DE HOMBRE LOBO


BELLA ES LA TIPA MÁS INDECISA DEL PLANETA


ALICE ES UNA MUTANTE ENCUBIERTA

viernes, 23 de abril de 2010

Tributo cinéfilo a Youtube

Si no fuese por mensajes lapidarios como "este video no está disponible en tu país" o "este video fue eliminado por violación de Copyright" o "inserción desactivada por solicitud", Youtube sería perfecto. Pero como todo en el mundo, no lo es.


Y a pesar de los dolores de cabeza que nos causa con esos simpáticos mensajes y alguno que otro error repentino, el sitio de videos es un paraíso en el que conviven la estupidez y el sinsentido con lo útil y extrañamente genial.

En este punto, los cinéfilos tenemos que agradecer el hecho de que Youtube es una ventana para apreciar esos cortometrajes que rara vez o nunca podemos ver en los cines, y también para descubrir talentos que nos enseñan que a veces sólo es necesario tener una buena idea y una perseverancia a prueba de rechazos para hacer las cosas bien.

Aquí algunos ejemplos de lo que se ha colgado en Youtube a lo largo de sus cinco años de vida. Haz clic sobre las imágenes para ver los cortos.


ATAQUE DE PÁNICO





KIWI!

7:35 DE LA MAÑANA

EL HÉROE

PADRE E HIJA

jueves, 22 de abril de 2010

Cinco películas para despertar la conciencia ecológica

Día de la Tierra por arriba. Día de la Tierra por abajo. Día de la Tierra en Facebook. Día de la Tierra en Twitter. El Día de la Tierra se siente en cada rincón del mundo virtual, menos en el mundo real. En fin. El objetivo es hacer que se despierte nuestra conciencia ecológica, y en esto La Rata Cinéfila puede ayudar. ¿Cómo? Recomendando algunas películas que ilustran a su manera las consecuencias de comportarnos mal con el planeta. Ahí van.


WALL-E, de Andrew Stanton

Una de las mejores películas de Pixar es también una de las críticas más ácidas a la doble cara de la tecnología: mientras por un lado hace más cómoda y placentera la vida del ser humano, por el otro le hace perder el deseo de mejorar su entorno y relacionarse verdaderamente con los demás. Imposible olvidar la casi muda historia de amor entre el destartalado WALL-E y la avanzada EVA.


UNA VERDAD INCÓMODA, de David Guggenheim

Ya sabemos que para los gobiernos y un gran número de personas, el tema del calentamiento global es la última rueda del coche o una alarma sin sustento. Para darles una bofetada con argumento tenemos este documental en el que Al Gore, ex candidato a la presidencia de los Estados Unidos, expone de manera muy didáctica las catastróficas consecuencias del fenómeno. Imperdible para esta fecha.


EL DÍA DESPUÉS DE MAÑANA, de Roland Emmerich

Si a Emmerich le gusta destruir más que crear, no hay vuelta que darle. Esta no es una gran película, pero se puede rescatar su tono bienintencionado respecto al tema ambiental y a los repentinos cambios de temperatura que afectan al planeta. Bienvenida sea la catástrofe... en la cartelera.


2012, de Roland Emmerich

O lo que podría llamarse El día después de mañana 2. Si lo que pasó en el filme previo te puso los pelos de punta, aquí el resultado es más perturbador. Y con las noticias de sismos en todo el mundo y un volcán que tiene en vilo a Europa, lo es aún más. ¿Será ese el futuro que nos espera?


EL SABOR DE LA SANDÍA, de Tsai Ming-liang


¿Qué pasará cuando el agua se vaya haciendo cada vez más escasa? Esta extraña película lo ilustra: los programas de televisión taiwaneses enseñarán maneras de ahorrar el líquido elemento y recomendarán el consumo de sandías para reemplazarlo, mientras otros la robarán y sobrevivirán de maneras inimaginables. En medio de este caos que se mezcla con bailes y canciones surrealistas y sexualmente explícitas, surgirá el amor entre dos seres que parecían condenados a la soledad.

miércoles, 21 de abril de 2010

Si al cine quieres ir, estos consejos debes seguir

Basado en la suma de buenas y malas experiencias, aquí van mis recomendaciones para ti y tus acompañantes a la hora de ir a ver una película en pantalla grande.




1. Revisa la cartelera en el periódico, en Internet o en las inmediaciones del cine, y escoge el título que mueres por ver. Nunca te pongas a pensar o a discutir en la cola donde se paga las entradas, peor aún si llevas gente contigo. Y eso sí, asegúrate de que la película escogida no va a herir la susceptibilidad de tu acompañante. Por ejemplo, a un cardiaco o a un niño no los puedes llevar a ver algún filme en el que las vísceras vuelan, ni a una tía religiosa someterla cada cinco minutos a escenas picantes.

2. Evita ir con bebés. La entrada en estos casos le puede salir gratis a tu niño(a), pero podrías pagar caro tu imprudencia. ¿Por qué? Porque si se despierta -que lamentablemente es lo usual- su desafinada garganta te va a arruinar la película al igual que a todos los demás que no tenemos la culpa de tus ansias por poblar el mundo. Si es imposible dejar a tu critter en casa, puedes llevarlo al cine siempre y cuando le hayas dado una buena dosis de Diazepam.

3. Entra al baño antes o después de la entrada a la sala. Nunca salgas en medio de la proyección. Nadie paga para ver tu esbelta silueta.

4. No comas demasiado. Está bien que la duración de la película o algunas escenas te puedan dar hambre, pero es desagradable que te pongas a masticar la canchita como si fueras vaca o que hagas ruido cuando tomas tu gaseosa o, peor aún, que lances un poco discreto eructo después de tragar un hot dog. Si se te acaba la comida, no te pares hasta que enciendan las luces.

5. Apaga el celular. Si no lo quieres hacer, al menos pónlo en modo de silencio y con vibrador. Contesta sólo los mensajes, y si tienes una llamada urgente, puedes contestar en voz baja. Si tu equipo es de aquellos que tienen radio incorporado, apágalo sí o sí.

6. Nunca hagas comentarios de la película mientras la estás viendo. Guárdatelos para el tiempo que pasen los créditos o para cuando estés fuera de la sala.

7. Por ningún motivo te tomes fotos con tu flaca, tu peor-es-nada o tus amiguitos mientras la película está en marcha. Se puede entender tu romanticismo o el hecho de que quieras registrar las emociones de tu grupo, pero tu idiotez no tiene perdón. Además podrías ganarte insultos de grueso calibre o algún golpe que no te dejaría bien parado.

8. Trata de ir completamente sano(a). Tú ya sabes: los estornudos y sus viscosos derivados no sólo son una molestia, sino el inicio de una cadena de enfermos involuntarios.

¿Algún otro consejo? Se aceptan propuestas.

lunes, 19 de abril de 2010

"Furia de Titanes": Un remake colosal y decepcionante

¿Quién no se quedaba boquiabierto con las historias de los héroes griegos cuando niño? ¿Quién no sentía cierta repulsión por los monstruos o atracción por los seres fantásticos que poblaban esos relatos? ¿Quién no quería que los dioses del Olimpo le regalaran una espada o un casco de la invisibilidad?

La mitología griega ha sido el motor que ha hecho trabajar nuestra imaginación, y también la fuente de inspiración para el cine. En este sentido, la primera versión de Furia de Titanes se convirtió -a pesar de sus deficiencias- en un clásico ochentero que sigue siendo un referente para grandes y chicos.

Sin embargo, las cosas han cambiado bastante para la nueva Furia de Titanes y lamentablemente no ha sido para bien o para hacer del remake una pieza memorable o una suerte de homenaje a la obra original. Así veremos que Perseo, el hijo mortal de Zeus, se embarcará en un peligroso viaje para liberar a toda la Tierra del caos que Hades quiere iniciar.

Aquí radica la primera diferencia con el filme ochentero: el argumento. Si bien se mantiene el esquema del viaje de Perseo, las motivaciones del personaje son totalmente distintas. Incluso su historia personal ha sido convenientemente manipulada y alejada de la fuente mitológica que respetaba el filme de Desmond Davis: el héroe no será el fruto de Zeus con la hija de Acrisio, sino de la unión de la esposa de éste con el dios.

Y así se irán agregando situaciones más "dramáticas": Perseo se criará con una familia desdichada que es destruida por Hades, y por ello nacerá el sentimiento de venganza que motivará su viaje, no la salvación de Argos o el forzado sacrificio de la bella Andrómeda. Si hasta ahí pensabas que habían modificaciones, pues lamento decirte que habrá más como el origen de Calibós y los escorpiones gigantes y otros hechos que me demoraría en enumerar.

Aspectos esenciales de la película original como la escena de la cabeza parlante y el búho de metal que prácticamente era un actor de reparto, se encuentran ausentes o ultraminimizados en esta versión que se regodea en criaturas digitales malhechas y que tienen más de la plasticidad de la estética del videojuego que del realismo rústico del stop-motion.

Respecto a las actuaciones, Sam Worthington no ayuda en el rol protagónico: su Perseo es un Jake Sully sin muletas e incapaz de transmitir emoción alguna. Liam Neeson como Zeus y Ralph Fiennes como Hades tienen buenas intervenciones, pero el guión no les permite dar más. Y de esta forma también se desperdicia un personaje interesante como Draco, el experimentado soldado que interpreta el danés Mads Mikkelsen.

Con este desalentador balance, de algo estoy seguro: este remake de Furia de Titanes no pasará a la historia por su improvisada conversión al formato 3D, por la abundancia de sus (fallidos) efectos visuales o por tener al héroe de acción del momento como protagonista, sino por haber destrozado el recuerdo de un clásico en menos de dos horas. Y para eso no era necesario liberar al Kraken.

Mi calificación: 3.1 de 10

viernes, 16 de abril de 2010

Yo, La Rata Cinéfila


Hola, especies parlantes de todo el mundo. Soy La Rata Cinéfila.
¿Por qué no una ardilla, un topo, un conejo u otro roedor o animal con más gracia y más simpatizantes?

La verdad, no tengo la menor idea. El tipo que está a la derecha me puso ese nombre y hasta ahora no sé si soy su hijo, su alter ego, su creación, su amigo imaginario o alguna de las múltiples personalidades en las que suele dividirse cuando no hace más que rascarse la panza.

Como se habrán dado cuenta -mi nombre lo dice- soy una Rata a la que le fascinan las películas. Mi vida es justamente eso: ir de mi madriguera al cine y del cine a mi madriguera, aunque a veces cambio el rumbo y visito a mis amigos Jack Sparrow para pedirles algunas pelis que la tormentosa voluntad de los distribuidores impide que lleguen a la cartelera de mi ciudad.

¿Qué más les puedo decir sobre mí? Por el momento, nada. Pero les aseguro que en cada post que publique sabrán lo que esta Rata tiene en la cabeza o, mejor dicho, lo que La Rata de su autor tiene en la cabeza. Bienvenidos a mi blog.