Antes de Toy Story, un cortometraje definió el rumbo de Pixar. Mejor dicho, un cortometraje definió la identidad que tomaría el prestigioso y galardonado estudio de animación: Luxo Jr.
La pequeña obra, que apenas roza los dos minutos, sirvió de inspiración para crear el logo del estudio y para sentar la estructura de la relación padre-hijo que han marcado los largometrajes de Pixar. John Lasseter supo darle dinamismo a las líneas de sus dos personajes, y dotarlos de un interesante lenguaje gestual a pesar de no tener rostro. Un clásico de culto.
Mi calificación: 7.1 de 10
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